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cuadernodenoche / lunas

Crisálida. Adonis

Morirás y habitarás como yo en la sombra,

bajo las estaciones,

donde el único vecino es nuestro eco.

En el polvo y la hierba, cuando al cruzar una vez

trazamos nuestros pasos

en el libro de las llanuras.

Y aquí permaneceremos,

como huella de la sombra en la sombra,

bajo las estaciones,

como vestigio para los demás

cuando caigan y los extravíe nuestro eco.

 

 

 

 

 

 

De Libro de las huidas y mudanzas por los climas del día y la noche.

Traducción, prólogo y notas de Federico Arbós

(ediciones del oriente y del mediterráneo, Madrid 1993)

Peonía roja. Wang Wei

Silenciosas y serenas sus hojas;

su manto rojo varía de claro a oscuro.

 

 

 

El alma de la flor padece de tristeza:

¿cómo entiende mi corazón la espléndida primavera?

 

 

 

 

 

 

 

 

De La montaña vacía (Antología)

Traducción, introducción y notas de Guillermo Dañino

(Ediciones Hiperión, Madrid 2004)

Semejanzas. Mohammed Bennís

 

 

 

Ella

lleva sus ojos

brevemente

hacia lo que desconoce

 

Ella

no le pregunta

nunca

si ese silencio

le pertenece

 

Él será quien ría

o bien

será

espacio para los sollozos

en las semejanzas

del silencio

 

 

 

 

De El don del vacío

Traducción de Luis Miguel Cañada

(ediciones del oriente y del mediterráneo, Madrid 2006)

 

Como el aire que traslada las dunas... Ana María Navales

 

Como el aire que traslada las dunas

marchó la imagen sobre el vuelo sin destino

y extendió su marcha pegajosa con lentos adioses

allá donde el sol no se hace visible ni a los ángeles.

Queríamos seguirle con ojos fascinados

y hacíamos apuestas que escuchaban nuestro miedo

mientras la piel se endurecía entre las sombras

y el brazo era un lienzo para el dibujo con cristales.

Del exilio a las raíces

con el viejo desorden que olvida el calendario y las estrellas

empezamos hoy a cultivar el campo invadido por las orugas

y ya la tierra no ofrece sino mariposas sucias.

 

 

 

 

 

De Los espías de Sísifo

(Ediciones Hiperión, Madrid 1981)

 

Mapa Burmese. Sir R.C. Temple

Mapa Burmese. Sir R.C. Temple

 

 

 

 Fuente: NYPL. Digital Gallery

Los muros que te aíslan del cielo... Josep Janés I Olivé

 

Los muros que te aíslan del cielo

y el mar, celosos, te atesoran

de toda mirada. La estrella

del alba y el viento furtivo

 

te ignoran. El mar y la luz

no te saben. Estrellas, noche

se funden contigo. ¿Qué azar

llevaría mis párpados

 

abiertos al son o al astro

que tú eres? ¿O anhelo, fueras

perfume o ramo de silencio

 

que nunca se aja? Sueño y luz,

tuyos en la estrellada noche.

―Tú, como una inmensa mirada.

 

 

 

 

 

De Poesía, 1934-1959

Traducción del catalán Jesús Pardo

Introducción de Clara Janés y Jesús Pardo

(Huerga & Fierro Editores, Madrid 2008)

 

Stimmung. Karlheinz Stockhausen

Stimmung.  Karlheinz Stockhausen

 

 

Llegada del nomada. Faik Husein

 

Vengo de la cintura del desierto.

Vengo cargado con mi sombra y con mis talismanes,

con mis espejos y mis máscaras.

 

Con cenizas me arropo.

Ofrezco mi rostro a la sal del mar,

y a los vientos mis semillas, mis nombres y mis palabras.

 

 

 

 

 

De Las escamas del corazón

(Provincia, colección de poesía. León, 1972)

 

Así será para mí también... Jesus Ferrero

 

    Así será para mí también

la media noche mañana

cuando alzando la copa ante la luna

crea ver en ella la luna diluida.

 

    Derretidas esmeraldas

abrirán mi alma a los bosques,

 

abrirán mis ojos.

 

    Llanuras heladas,

senderos de azulada bruma,

piel del agua

tamizando la tierra, amándola

calladamente,

y la tímida hojarasca crujirá bajo mis pies…

¿Pediré algo más a los días que me quedan?

 

 

 

 

De Río amarillo

(ediciones Pamiela, Navarra 1986)

 

Me dijo... Nazim Hikmet

 

Me dijo por qué no vienes

por qué no te quedas

por qué no sonríes

por qué no mueres

He venido

He quedado

He sonreído

He muerto

 

 

 

 

 

 

De Poemas finales

Traducción de F. García Burillo y Çagla Soykan

(ediciones del oriente y del mediterráneo, Madrid 2009)

Vestigios... Jean Arp

 

vestigios

de vértigos

en tallos

de estrellas

 

 

 

 

 

 

De Días deshojados

Traducción de Jesús Munárriz

(Editorial Hiperión, Madrid 1983)

Venas negras. Jean Arp

 

en mi corazón de bruma

muere la quimera de las rosas

se sienta un astro en mi cama

está viejo y cuarteado

 

arañas grises desfilan

hacia el horizonte de venas negras

se van como para el entierro de un hada

el vacío suspira

 

mis pobres sueños han perdido sus alas

mis pobres sueños han perdido sus llamas

aprietan los codos

sobre el ataúd de mi corazón

y sueñan migas grises

 

el día reaparece

pero ya no tengo fuerzas

el cielo baja y me cubre

abro para siempre los ojos

 

 

 

De Días deshojados

Traducción de Jesús Munárriz

(Editorial Hiperión, Madrid 1983)

 

Sin título. C. Dolores Escudero

 

Desde el jazmín, las parras,
las violetas, la hiedra, el membrillo
y tu ausencia.

Miro hacia adentro

Adentro
que es mi casa,
tu casa,
vuestra casa.

Adentro.

Adentro el donde

 

 

De Vae victis! 7 julio 2006

 

 

En la oscuridad. Forugh Farrojzad

 

En la oscuridad

te llamé

Todo era silencio y una brisa

que se llevaba la cortina

En el cielo apagado

una estrella ardía

una estrella partía

una estrella moría

Te llamé

te llamé

Tenía en las manos

mi existencia toda

como un cuenco de leche

La azul mirada de la luna

chocaba con los cristales

 

La canción de la tristeza

ascendía como humo

de la ciudad de los grillos

como humo sobre las ventanas

se deslizaba

 

Toda la noche allí

en mi pecho

hubo quien jadeaba

de desesperación

quien se levantaba

quien te deseaba

y sus dos manos frías

volvía a rechazar

 

Toda la noche allí

de las ramas negras

se estuvo desmoronando una tristeza

hubo quien se enajenaba

quien te llamaba

El aire se derrumbaba sobre él

como una ruina

 

Mi pequeño árbol

amaba el viento

al errante viento

¿Dónde está la morada del viento?

¿Dónde está la morada del viento?

 

 

 

De Nuevo Nacimiento

Traducción de Clara Janés y Sahand

(ediciones del oriente y del mediterráneo, Madrid 2003)

Cementerio de Malá Strana. Josef Sudek

Cementerio de Malá Strana. Josef Sudek

 

 

  

UNA VENTANA EN PRAGA. FOTOGRAFÍAS AÑOS 50
JOSEF SUDEK

Círculo de Bellas Artes de Madrid.

 

Anécdotas. Lie Tse

 

 

Cuando Lie Tse era discípulo del maestro

Linn de Hu-k´iu, éste le dijo un día:

 

―Cuando hayas comprendido lo que hay

detrás de ti, te enseñaré a comprenderte

a ti mismo.

 

―¿Y qué hay detrás de mí?― preguntó

Lie Tse.

 

―Tu sombra― dijo el maestro Linn de

Huk´iu; examínala.

 

[…]

 

 

 

 

De Tratado del vacío perfecto

(José J. de Olañeta, Editor, Palma de Mallorca 2003)

 

Vivir en tu voz, Paloma Palao

 

Vivir en tu voz,

doblarme

bajo tu párpado, sería necesario

para compensar

el beso

de nieve, la luciérnaga

de esta resurrección imposible. Pero nada

han hueco como el agua,

donde el pozo

no es medida, sino acumulación

culpable del vacío, inexistencia

proclamada,

fondo desposeído por su transparencia,

recompensa de mirar

hacia la oscuridad

y hacia dentro.

 

 

 

 

 

De Resurrección de la memoria

(Anthropos Editorial, Barcelona 1978)

 

 

Cruza la rosa las tinieblas, Clara Janés

 

Cruza la rosa las tinieblas,

como llama silente,

e incorpora el abismo de la sombra.

Corazón en vigilia,

se erige en centro inagotable,

funde la vagorosa ausencia

que recubre la órbita del alma.

El sol es un reflejo,

el aire no es medida de su alcance.

 

 

 

 

 

 

De Rosas de fuego

(Ediciones Cátedra, Madrid 1996)

 

Cuarteto de cuerda nº 3. Giacinto Scelsi

 

 

 

 

Cuarteto de cuerda nº 3 (1963)

 

 

I.       Avec une grande tendresse (dolcisimo)

II.      L´appel de l´esprit: dualisme, ambivalence conflit (dramático)

III.     L´âme se réveille… (con transpareza)

IV.      …et tombe de nouveau dans le pathos mais maintenant avec un pressentiment de la libération (con tristezza)

V.       Libération, catharsis

 

 

¡Noche, amiga mía... Vladimír Holan

 

¡Noche, amiga mía, ya no sé dónde ir!
Para todas las nadas que no sirven para nada
tengo solamente algo de blanco aquí y allá…

Sí, contesta la noche,
pero si yo hubiera malgastado el negro como tú 
hace tiempo que hubieses dejado de ser tiniebla.

 

 

Recogido por Clara Janés en El espejo de la noche. A Vladimir Holan en su centenario.   

Estudio y conversaciones.  (Editorial AdamaRamada, Madrid 2005)